Denuncia Raúl Flores a Claudia Sheinbaum ante PGJDF por omisiones respecto al Colegio Rébsamen
Ciudad de México,- El presidente del Partido de la Revolución Democrática en la Ciudad de México (PRD-CDMX), Raúl Flores García, denunció ante la Procuraduría General de Justicia (PGJDF) a la delegada en Tlalpan, Claudia Sheinbaum Pardo; y a otros funcionarios de dicha demarcación, por negligencia y omisión que derivó en el colapso del Colegio Rébsamen, a causa del terremoto del 19 de septiembre pasado.
Dentro de la denuncia presentada Flores García también se considera como posible responsable al actual Director General Jurídico y de Gobierno de dicha demarcación, Fernando Hernández Palacios; a Manuel Santiago Quijano, Director General de Obras de Tlalpan; y a la dueña del colegio Enrique Rébsamen, Mónica García Villegas.
El también diputado local pidió investigar los posibles actos de corrupción cometidos que ocasionaron el derrumbe de la escuela en cuestión, ya que de acuerdo a documentos, dicho plantel no contaba con el uso de suelo para operar como tal y usaba documentación apócrifa que permitió la construcción y apertura como establecimiento mercantil con giro de escuela, cuando el uso de suelo de la colonia donde se estableció como tal es meramente habitacional.
“Lo que no ha dicho Sheinbaum es que ella tenía una responsabilidad… pues sabía que el dictamen de seguridad estructural estaba vencido y sabiéndolo dio el visto bueno al dictamen de seguridad y operación, y sabía que el colegio no estaba subsanando el programa interno de protección civil”, sentenció.
Raúl Flores dijo que sin duda se tiene que investigar la responsabilidad que pudieron haber tenido servidores públicos de pasadas administraciones en Tlalpan sin importar si eran o son perredistas.
Ante la pregunta si lo acontecido en dicho colegio y en otros edificios que colapsaron en Tlalpan se traduce en corrupción, Raúl Flores afirmó que los jefes delegacionales son los directamente responsables porque las áreas de protección civil están directamente adscritas a las oficinas de los jefes y jefas delegacionales, por lo que la omisión también es una forma de corrupción.